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Lección de fútbol en Brasil, final Libertadores 84

El 24 de julio de 1984, Independiente cosechaba uno de sus triunfos coperos más importantes al derrotar en Porto Alegre al local Gremio, por entonces campeón interncontinental.
El equipo de Pastoriza dio una lección de fútbol en tierras gaúchas y tanto el público, los rivales y los medios brasileños se rindieron a sus pies. Inolvidable.
El Rey de Copas llegaba a su séptima final de Libertadores y buscaba su séptima coronación. Enfrente tenía un rival muy difícil que era nada menos que el campeón intercontinental, Gremio de Porto Alegre, quien había vencido a Peñarol, un histórico de la copa, en la final anterior de América.
Gremio tenía como figuras a su capitán Hugo De León y a Renato (actual DT, único brasileño campeón de la copa como jugador y entrenador). El equipo brasileño había ingresado en la 2da Fase de la Copa, en la que eliminaría a un gran equipo de Flamengo, que contaba con varios históricos: Fillol, Júnior, un joven Bebeto y Carlos Alberto como director técnico.
El partido de ida se jugó en Brasil ante 80.000 espectadores.
Salieron a la cancha en el Olímpico de Porto Alegre: Goyén; Clausen, Villaverde, Trossero, Enrique; Giusti, Marangoni, Bochini; Burruchaga, Bufarini y Barberón.
A los 24 minutos del primer tiempo, Jorge Burruchaga marcaría el único tanto del encuentro tras un pase magistral de Ricardo Bochini. El 1 a 0 fue un resultado extraño e injusto porque la diferencia pudo ser mucho más amplia, aunque el conjunto local tuvo aproximaciones en la primera parte.
Independiente jugó un partidazo y fue tal el dominio que una vez finalizado el partido se escuchó una silbatina generalizada, la multitud brasileña esperaba más del equipo local. Sin embargo despidieron a los jugadores del Rey de Copas con aplausos.
En las grandes copas de esos años no sucedía seguido que un equipo visitante jugara tan buen fútbol y mirando el arco contrario.
Los elogios también llegaron de la prensa brasileña, que en los diarios le dieron puntuaciones muy altas a los jugadores del Rojo.
A los pocos días se jugaría la revancha en el templo del Rey…