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El Rojo de Miguel Brindisi
El 8 de octubre de 1950, nacía, en Buenos Aires, un ex entrenador rojo que ganó 3 títulos en menos de un año: Miguel Ángel Brindisi.
Fue uno de los mejores volantes derechos que tuvo el fútbol argentino y luego, en sus inicios como entrenador, lideró un equipo que le dio muchas alegrías al hincha de Independiente.
Miguelito Brindisi brilló en su etapa de futbolista, destacándose en la posición de volante por la derecha, ganando títulos en Huracán, Boca y Nacional. Jugó también en Las Palmas, Unión y Racing cuando estaba en la B. Con la Selección Argentina disputó el Mundial de 1974, que resultó flojo para un seleccionado que contaba con grandes jugadores.
Como director técnico se inició en Alumni de Villa María, luego continuaría en Municipal de Guatemala (fue campeón), Barcelona de Guayaquil (fue campeón), y Las Palmas.
Arribó a Independiente a finales de 1993 y en poco tiempo ganaría títulos importantes.
En su primer semestre en el club, con la interrupción del Mundial de 1994, ganaría el Torneo Clausura 1994 con un final de campeonato muy bueno, con fútbol y grandes goleadas, consagrándose campeón en la última fecha con una contundente goleada por 4 a 0 al Huracán de Cúper que llegaba puntero a esa instancia.
El Rojo de Brindisi cerraría un año perfecto con uno de los logros coperos más festejados de la historia, la Supercopa Libertadores 1994, ganada al Boca de Menotti tras un empate en 1 en La Bombonera y un 1-0 en la Visera con gol de Rambert. En esta copa el Orgullo Nacional superó a Santos, Gremio, Cruzeiro y Boca Juniors.
Y lo último de Miguel Brindisi en su primera etapa en el club fue la obtención de la Recopa Sudamericana 1995, en Japón, venciendo con un gol de Serrizuela al Vélez de Bianchi que era el campeón intercontinental.
Se marcharía antes de que el Rey de Copas volviera a ganar la Supercopa.
Después de dirigir a varios equipos (Racing, Barcelona, Gremio, Espanyol, Huracán, Lanús, Boca, Estrella Roja, León, Atlas, Jaguares y Aucas) y a la Selección de Guatemala, regresaría en el peor momento del club sin poder torcer la historia.