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“En algún momento voy a volver a Independiente porque es mi casa”

El ex volante de Independiente tiene ganas de retornar.

Federico Mancuello habló de todo desde México. Su paso por Independiente, su relación con Jorge Almirón, el descenso y mucho más.

Para comenzar, Federico Mancuello recordó su préstamo a Belgrano de Córdoba, cuando no tenía continuidad en Independiente: “Mi paso por Belgrano fueron dos pasos para adelante. Jugar en Independiente con 18 o 19 años te puede marear. Las marcas te buscan y regalan cosas. En cambio en Belgrano era todo más sacrificado. Después de eso pude disfrutar el fútbol de otra forma. Es importante aprender con cada cambio”.

Sobre su amor por el club, declaró: “Yo todos los días iba a Independiente con el objetivo de dejar algo desde lo futbolístico y lo humano. El cariño que uno siente por la institución me llevaba a eso. El poder ayudar al club en un momento delicado y después irme con una venta. Yo decidí firmar mi renovación antes de irme, para devolverle al club todo lo que el club me dio a mí. Marcharme con ese recuerdo que tiene la gente de mí es maravilloso”.

En diálogo con Doble Amarilla, recordó los momentos complicados que vivieron durante el descenso: “Lo más difícil para nosotros eran las condiciones en las que vivíamos. No eran acordes a la institución donde estábamos jugando. Gracias a Dios después se acercaron personas como Pablo Moyano, Hugo Moyano, Yoyo Maldonado, Carlos Montaña, Fabio Fernández. Ellos se sumaron y pusieron el club en orden“.  Y contó una anécdota insólita: “Ese año que estábamos por descender se suspendió un partido con Banfield por lluvia y nos hicieron entrenar en el vestuario. Se acercó un jugador de Banfield y le dijo al Pocho Insúa que estábamos locos, que se jugaba mañana y el Pocho le dijo que no. Nosotros no sabíamos que se jugaba al otro día. Tuvimos que volver al hotel y nos pidieron pizza y coca para cenar, teniendo que jugar 24 horas después“.

Sobre qué sentía previo a salir a la cancha, declaró: “Para nosotros siempre fue un orgullo poder jugar en ese equipo. Poníamos la cara todos los fines de semana. Te olvidabas de todo cuando te ponías la camiseta, era algo normal”. También agregó cómo le afectaron las críticas al Ruso Rodríguez y Martín Benítez: “Me duele como amigo, las criticas que recibió y la forma que se fue el Ruso. Era una locura poner a un chico a jugar en condiciones que no eran las correctas. Por ejemplo el caso de Martín Benítez. A él no le importaban las criticas y lo que decía la gente, pero hubiera sido bueno que jugara en condiciones normales, con un equipo armado y no que tenga que ser la salvación“.

También recordó a Javier Cantero: “Primero para ser presidente te tenés que capacitar. Después conocer el proyecto. Tenés que entender que si vos descuidas el fútbol, descuidas lo mejor, lo que te da la posibilidad de sustentar al club. Él lo fue descuidando. Yo no te puedo dar una opinión de lo que el quería, pero nosotros si nos sentíamos descuidados, porque nos decían una cosa y hacían otra totalmente distinta. No me refiero al tema del dinero, sino que te decían que jugabas un jueves y terminabas jugando un domingo”.

Sobre su relación con Jorge Almirón y su recuerdo en Independiente, expresó: “Con Jorge hicimos un montón de cosas nuevas, que el equipo no venía haciendo. La gente se vio identificada. Jugábamos casi con los mismos chicos que ascendimos. Jorge se la tuvo que arreglar con algunas piezas y no nos fue mal. Nunca vi un vestuario de la manera que lo vi cuando él se tuvo que ir. La gente hoy valora mucho lo que hizo, porque después él lo replicó en otros equipos donde consiguió cosas. Era una manera de vivir, estaba medio loco. Era un loco por Independiente. Estaba todos los días al límite y te llevaba a vos también a estarlo. Te hacía vivir de una manera que te hacía crecer. Fue un crecimiento total para todos. Fue el entrenador que mejor me hizo sentir”. Además contó: “Hablo siempre con Almirón. Una vez al mes, al menos. Me quiso llevar a Lanús en su momento. Y en San Lorenzo estuve muy cerca. Si iba ahí, era solo por él”.

Veo siempre a Independiente. Uno como hincha se pone nervioso. Hoy no está en su mejor momento. Supo jugar mejor, como con Ariel Holan. El hecho de desarmar el plantel fue un cambio que se sufrió, no entiendo por qué se hizo. Las cosas fueron pasando y el equipo hoy busca su identidad de nuevo”, analizó la actualidad del Rojo.

Estuve muy cerca de volver, faltaba un día para el cierre del libro de pases y me llamó la dirigencia. Mi representante primero les dijo que no, que me dejen tranquilo, porque siempre me ilusionaban con volver y no se daba. Un jueves estábamos almorzando y me dijo que me habían vuelto a llamar. Le dije: ¡Deciles que sí! Al día siguiente se iban a comunicar con Pusineri, hablaron con él y decidieron que no. En algún momento voy a volver, siempre voy a tener un lugar ahí, porque es mi casa. Porque cada vez que voy, todas las personas me conocen y me besan. En algún momento de mi vida voy a volver, pero cuando se den las condiciones”. Además agregó: “Hablé con Pusineri, me comunicó que quería un delantero y que el viernes se iban a comunicar conmigo. Se contactaron con mi representante y le dijeron finalmente que no. Con el tiempo aprendí que las decisiones pasan por algo. Si no me eligieron esta vez, por algo será. Me elegirán en otra lado, donde sí me quieran. Uno tiene que estar donde lo eligen y donde te sentís querido e importante”.

 

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