Columna de Opinion
Un nuevo capítulo que nace sorpresivamente
a noticia sorprendió al mundo de Independiente en especial y al fútbol todo. Hay que reconocer que fue inesperada.
Nadie miraba hacia Julio Falcioni y a Pedro Monzon.
A veces los golpes de timón son buenas decisiones. Lo veremos con el tiempo.
Mientras tanto nada hay para criticar a Pelusa Falcioni, su historia de trabajo y convicciones es conocida, puede gustar más o menos su estilo pero nadie puede discutir sus conocimientos, desconocer sus logros o discriminar por su edad.
Incluso el actual técnico de Banfield, Sanguinetti no se cansa de ponderar el camino que Falcioni trazó para este presente del Taladro subcampeón que acabamos de apreciar.
Y a Monzón lo recordamos como un jugador fuerte que dejaba todo en cada jugada, en Independiente y en la Selección.
Enamorado del rojo desde siempre. No dudo ni dejo nunca de pedir una oportunidad.
El 12 de diciembre de 2004, Monzón dirigió al Rojo interinamente, había llegado para los tres partidos finales del campeonato. después la salida desprolija de Daniel Bertoni quien había asumido tras la muerte del Pato Pastoriza. Ese día era la última fecha del Clausura y en la Doble Visera recibimos a Newell’s Old boys que lo dirigía el Tolo Gallego y estaba para salir campeón.
En esa fecha se puso en disputa la Copa DAIA, que comenzaba a festejar su 70 aniversario.
Gano Independiente 2 a 0 con goles de Jairo Castillo e Insua. Newells igual salió campeón porque Vélez no lo alcanzó y festejo en Avellaneda
La Copa se la entregue junto al Presidente de la DAIA, Jorge Kirszembaun al Mono Navarro Montoya.
Lo saludé a Monzón y lo felicité como hincha de Independiente por el triunfo, me abrazo sin conocerme y me dijo, solo le pido a Dios que me dejen seguir siendo el Director Técnico.
No fue así la historia. A el lo continuo Santoro y luego precisamente Falcioni
Fue la única vez que hable con él y nunca me olvidé de esa conversación.
Siempre recordé como me hablo desde el corazón como solo dos hinchas pueden hacerlo al hablar de su club.
Hoy cuando Soy del Rojo dio la primicia confieso que me sorprendí como todos y me acordé de esta anécdota.
A mi me da gusto el regreso de Julio Falcioni y mucho más que a Pedro Monzón su sueño más profundo se le haya hecho realidad acompañando a Falcioni.
Es un tiempo nuevo, otra vuelta de página y y nosotros los hinchas, una vez más debemos estar dispuestos a creer y a acompañar.
Es lo que nos corresponde hacer.