Columna de Opinion
Triunfo engañoso
Independiente ganó sus primeros dos partidos y no le convirtieron goles. Parecería una muestra de solidez en defensa y un cierto equilibrio entre sus líneas. Sin embargo, dista de ser un diagnóstico correcto.
Si bien con Atlético Tucumán, el “Rojo” mereció ganar por un gol más, también desnudó distintas falencias y limitaciones. También es cierto que este domingo jugaron jugadores suplentes, en su gran mayoría. Es una elección del entrenador que tiene como prioridad la Copa Sudamericana. Por más lógico que resulte un menor rendimiento colectivo e individual, es inobjetable tener que marcar algunas coincidencias entre ambos cotejos.
Es valorable conservar el cero en el arco. No obstante, fue producto de una destacada actuación de Sebastián Sosa, que, de temprano, empieza a demostrar sus virtudes y argumenta los motivos de su llegada a Avellaneda. Si bien es importante contar con ese tipo de desempeño, también es importante remarcar que la defensa se mantuvo endeble este fin de semana y flaqueó en algunos momentos claves el pasado jueves.
Atlético Tucumán no tuvo una buena noche y no concretó sus chances. Por su parte, Central Córdoba reflejó que se trata de un equipo sumamente débil y carente de toda jerarquía para competir en una primera división. Ambos condimentos dan cuenta que si el rival de Independiente hubiera sido alguno de mayor juste, la realidad hubiera sido otra. No hubiera ganado. Pareciera contra fáctico pero la claridad de esas ocasiones suelen transformarse en gol con delanteros de calidad.
Hay numerosos descuidos entre los centrales y los laterales, y el mediocampo muchas veces no frena los embates, por lo que los ataques se realizan sin mucha resistencia.
Andrés Roa mostró indicios positivos, aportó cierta claridad pero tampoco hizo la diferencia que se le pide. Por su parte, Messiniti luchó, estuvo constantemente activo y generalmente estaba bien posicionado. Sin embargo, no fue suministrado y se cansó. Luego, no hay muchos datos salientes. Salvo algunos ejemplos que se salvan de la crítica como Asis y Pacchini (por algunos buenos momentos), hay jugadores que demuestran porque son muy suplentes como Domingo Blanco, que nada aportan al equipo.
Debido a algunas lesiones y los contratiempos para conservar la ventaja, algunos titulares vieron acción en el norte. Es importante que sigan con rodaje. El próximo jueves, Independiente deberá frenar una embestida del “Decano”, que buscará rápidamente igualar la serie. No solamente que tendrá la necesidad de reajustar sus fragilidades defensivas, sino que precisará dar un golpe de nocaut en Tucumán lo antes posible para ganar algo más de calma y llevar el ritmo del partido. Se juega mucho Independiente en el próximo encuentro. Y así sucederá en cada llave si es que termina avanzando ya que no hay margen de error.
Los principales desafíos del “Rojo” llegan en este momento. No son instancias finales en ninguna de las dos competencias que juega. No obstante, disputa dos campeonatos donde se juega por el todo y nada y lo transita con un equipo que pretende acelerar los procesos madurativos de varios meses, en un par de semanas. Una misión que pondrá a prueba la hombría, la disciplina y el potencial futbolístico de un plantel que definirá su destino en los próximos días.