Seguinos en nuestras redes

Columna de Opinion

El triste “Take Away” del rojo

Independiente es nuevamente pionero. En medio de las novedosas modalidades que surgen por la pandemia del coronavirus, el “Rojo” va más allá y se transformó en el primer equipo que ofrece “Take Away” con precios irresistibles. Incluso, en determinados artículos te regala el servicio de delivery, con moño y todo.

Aquel producto que tenía un valor nominal de $100 (como cifra ilustrativa), hoy sale $30. De esta manera, el club es un pequeño mayorista que ofrece descuentos por llevar en cantidad, siempre con medidas de higiene acorde a la presente emergencia sanitaria.

Todavía no está volcado en las plataformas oficiales, pero sí se pueden encontrar los bienes en You Tube, en los mismos canales donde Independiente compró por cifras exorbitantes a aquellos jugadores que contrataron un buen servicio para hacer un compilado de 10 minutos con sus mejores jugadas. Cualquier interesado por ese tipo de edición, comunicarse con Fernando Gaibor, o quizás con su representante que debe tener un prefijo más amigable que el de los Emiratos Árabes.

De esta manera, Independiente tiene en su carta una serie de promociones súper tentadoras arrancando por Fabricio Bustos, producto bien argentino y que casi es comprado por una compañía alemana por una cifra superior a los 15 millones de dólares. Su cláusula de salida es de 20 millones pero “la promo cuarentena” es de solo 3 millones de dólares y con pasaje incluido desde el Aeropuerto de Ezeiza, una vez que reabra la operatividad aérea.

Mismo razonamiento para el capitán campeón de la Suruga Bank: Martín Campaña. El arquero, campeón en el Maracaná, podía irse de Independiente si algún club desembolsaba 20 millones “verdes”. Sin embargo, el Rojo brinda al golero uruguayo por 2 millones y ofrece trasladarlo en camión sin cargo.

Ese valor de salida también se fijó para el zaguero Alán Franco, figura de la conquista de la Sudamericana. Codiciado por las principales ligas del mundo, hoy cuesta bastante menos que el influencer Cecilio Domínguez. Con el pago de 6 millones, en el paquete viene incluido un protocolo aprobado por el Ministerio de Transporte para que sea enviado al destino en un capsula sanitaria.

Son solo algunos de los ejemplos más elocuentes de la depreciación del patrimonio de Independiente. Si bien este autor enfatizó en la necesidad de desprenderse de aquellos que no rindieron (que no son estos casos) y de vender a algunos jugadores para acomodar las cuentas que están al rojo vivo, lo cierto es que observar semejante subasta de lo poco bueno que le queda al club en materia de futbolistas, entristece.

Aquel famoso patrimonio que tanto remarcó el ex entrenador de Hockey, hoy no existe o quizás nunca fue tal. La pregunta que muchos hinchas de Independiente se hacen es cuándo es momento de vender jugadores. Nos quejamos cuando se van rápido los Rigoni, Barco, Tagliafico y Meza pero terminan siendo las excepciones ante esta tónica devaluatoria. Si bien el capitán del 2017 no fue una venta extraordinaria, aún así cuenta con un buen ítem vinculado a una futura venta que próximamente repercutirá en las arcas si lo vende el Ajax.

Festejamos que los buenos jugadores continúen, pero cuando es momento de venderlos criticamos su actual cotización. Es triste ver que buenos jugadores como Campaña, Bustos y Alán Franco sean comparados con el exiliado e invendible Martín Benítez. Las comparaciones son odiosas pero van al caso. No supimos vender a la herencia de Ramón Díaz al fútbol turco por una cifra millonaria y fue prestado ante el primer pedido.

Está claro que esta crónica fue confeccionada partiendo de la base de los malos resultados que tiene el equipo desde el 2018 hasta la fecha. Si bien se habla con el diario del lunes, es innegable desestimar que este panorama era olfateado por muchos en los primeros fatídicos episodios que fuimos afrontando desde ese inicio de la Copa Libertadores.

El ya mencionado pozo depresivo fulminó cualquier tipo de crecimiento y desde entonces es todo desacierto y derroche indiscriminado. Hoy Independiente apuesta a vender “las joyas de la abuela”, las cuales ya no son esenciales. Las vende al primer interesado e incluso planea retomar el “Trueque”.

Asimilar que esas joyas hoy cuestan casi lo mismo, o menos, que el coqueto Alexander Barboza entumece, pero es una triste realidad.

Queda apostar en la salida de jugadores intrascendentes y caros, y vender lo mejor posible a los pocos buenos futbolistas que quedan en el plantel. Tras ello, repensar un equipo más terrenal, apostando por las promesas y refuerzos más estratégicos que estrafalarios.

Independiente apuesta al “Take Away” como forma de subsistencia en épocas de cuarentena. Si no resulta ese plan, no habrá ATP ni IFE que alcance para paliar la crisis futbolística y económica que arrastra desde más de 2 años y medio.

@nicogallaok

Leé las últimas noticias del Club Atlético Independiente

 

Continuar leyendo
Publicidad