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Columna de Opinion

Ninguna victoria partidaria puede subirse al tren de los socios

Ninguna victoria partidaria puede subirse al tren de los socios

Creo que la política partidaria no entiende ni va entender nunca el sentimiento genuino de un hincha de fútbol, menos de un exigente de paladar negro como somos los de Independiente.

Sí, hay figuras del PRO en la lista ganadora porque era la opción más visible y potable, es decir, la menos mala y así lo votaron 11 mil personas el domingo. Pero la verdadera victoria fue el 22-J, el récord de votación y la activa participación del socio que debe seguir despierto, no relajarse y exigir acorde a la historia del Rey de Copas.

Pese a que es tosco negarlo porque la grieta jugó el 2 de octubre en los comicios en el club de Avellaneda, la masiva cantidad de socios y socias que se acercaron a votar lo hicieron movilizados por la crisis institucional que vive su club, no porque la lista llevaba candidatos del PRO. Ninguna victoria partidaria puede subir al tren de los socios.

El hincha genuino vivió mucho más que una serie de derrotas en el césped en la última gestión moyanista que se alargó por la vía judicial casi 1 año durísimo. El hincha le dijo basta a la política partidaria y a la grieta entre ambas. Basta al sindicalismo dentro del club y los amiguismos. Basta al personalismo, pero fundamentalmente basta al destrato. Un ex presidente con vasta experiencia política y sindical que en su epílogo insultó a los hinchas que cuestionaron un resultado futbolístico. Un ex presidente que se enquistó en el poder y prohibió las otras listas.

Para que entiendan los que no son del Rojo. Teníamos que votar en diciembre del 2021, el oficialismo de los Moyano a la cabeza entendió que iba a perder y proscribió a la lista “del pro” como dieron en llamar como, claramente, tuvo y tenía alfiles del macrismo como Néstor Grindetti y Cristian Ritondo, principalmente.

La Junta Electoral decidió anular la lista de “Unidad Independiente” y ahí comenzó un largo proceso judicial de casi un año. En esta nota de verano, anticipábamos que hasta mitad del 2022 no iba a haber elecciones. No nos equivocamos que iba a tardar, fueron recién en octubre del 2022.

Las dilatadas elecciones de diciembre de 2021 formaron un caldo de cultivo que terminó en una escandalosa represión de la policía bonaerense a los hinchas en la noche del 22 de julio pasado que marcó un hito.

La crisis institucional y económica que vive el club no estuvo exenta de ningún condimento. El moyanismo vio que perdía las elecciones, y con la excusa que “no quería entregarle el club al PRO”, proscribió a la lista opositora de Fabián Doman en noviembre pasado.

La posterior judicialización de la lista “Unidad”, la lentitud del proceso judicial, la parsimonia de algunos candidatos así como la revolucionaria manifestación del hincha con la feroz detención y represión policial rompió la grieta que muestran las listas. Y tuvieron que poner fecha de elecciones porque ardía la hoguera.

Lamentablemente, post victoria de Unidad Independiente, el PRO más duro se subió a la victoria de los socios felicitando a Grindetti y a Ritondo, criticando a Moyano. Lo que no dicen es que ni participó, o no lo dejaron participar, del armado de “su” lista. La Cámpora y el peronismo bonaerense sacaron apenas 2 mil votos, salieron últimos, y hasta superados por la lista “Gente de Independiente”.

Aunque hay que destacar un dato que debemos aprender los socios: no podemos siempre votar al “menos peor” o “para echar al actual presidente”. Echamos a Ducatenzeiler para votar a Comparada, a Comparada para votar a Cantero, a Cantero para votar a Moyano, y a Moyano para votar a Doman. Espero que la historia no se repita porque hasta hubo gente que osó criticar a Don Pedro Iso, quien como otros dirigentes, hizo grande a Independiente dirigencialmente. Desde el 2000 para acá fueron nefastos TODOS con honrosos períodos de alguna buena gestión particular o armado de algún equipo digno.

Independiente debe dejarse de joder, votar en serio, el abismo ya pasó, cada uno ponga su grano de arena para que ningún dirigente nunca más nos ponga la mano en el bolsillo, nos insulte, nos boludee ni nos tome el pelo. Porque, señor socio, véalo claro, la verdadera victoria fue el 22-J, el récord de votación y la activa participación del socio que debe seguir despierto, no relajarse y exigir acorde a la historia del Rey de Copas.

Por Nicolás Resco

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